Sophia McGee
Siempre me
han gustado los comienzos. Eso es lo que me tenía sin dormir desde las 4:30 de
la mañana. No podía levantarme aún, simplemente era un poco ridículo levantarse
a las 4:30 si mis labores comenzaban a las 9:00.
Eran las
6:30 cuando se abrió la puerta de mi habitación. Detrás de ella apareció Susan,
una chica que está en la casa desde que tengo memoria, hija de la señora
Scoapes, encaragada de cuidar de los asuntos de la casa. Molly Scoapes siempre
me trató como una madre. Y Susan y yo siempre nos llevamos bien. Ambas castañas
con el cabello rizado, con ojos oscuros y grandes. La señora Scoapes, más
bajita y rechoncha que su hija.
— Buenos
días señorita McGee... — dijo mientras acomodaba las cortinas
— Susan... —
dije cansina, ya que odiaba que gente que me conocía desde que usaba pañales me
dijera "Señorita McGee".
— ..Será un
lindo día...
— Susan...
¿Qué es lo que hablamos?
— Oh, lo
siento Sophia — dijo ella sonriendo y saliendo un momento por la puerta, para
volver con una taza. — tú sabes, la costumbre.
Sí, yo lo sé.
La costumbre. Delante de mis padres u otros empleados, no podía decrime así.
— Lo sé
Sussy — dije suspirando, y por fin, me levanté. Ella negó sonriendo con la
cabeza y salió de la habitación.
No hay nada
mejor que un café en la mañana. Mientras lo tomaba, me paseé por la habitación,
inquieta. Hasta que me harté. Tenía demasiada energía. Necesitaba hacer algo.
Dejé el café en el buró, a sabiendas de que no estaría ahí cuando regresara y
que mi cama estaría tendida. Me puse unos pants, y salí de la habitación.
Al salir,
encontré a mi mamá, que se ponía unos pendientes de perlas. Alta, morena, con
el cabello negro azabache, y muy guapa. Vestida con su traje sastre. Al verme,
levantó las cejas con sorpresa. Me evaluó de arriba hacia abajo y por fin
habló.
— Sophia, es
muy temprano.
Sí madre, es
temprano ¿Y?
— Voy a
hacer algo de ejercicio mamá.
— Oh, bien —
respondió aliviada, y se acomodó el saco. — Yo voy a la empresa.
La empresa,
ese era el nombre que tenía el otro hijo de mis padres. El favorito, su bebé.
El que esperaban que yo cuidara e hiciera crecer y prosperar, cuando
llegara el momento.
— Sí mamá.
— Adiós
Sophia. — dijo ella y se fue. Me di la media vuelta y busque el gimnasio. El
demostrar el afecto no es una de las cualidades de mis padres.
Cuando
terminé de hacer ejercicio, fui a bañarme y a alistarme. Envuelta en una
toalla, me miré en el espejo. Este día, yo Sophia McGee, comenzaría la
universidad. Sonreí ante la idea. Peine mi cabello rápidamente, antes que
comenzara a secarse. Mi cabello es chino como el de mi padre y azabache como el
de mi madre. Mis ojos, son negros y grandes como los de mi padre. Cuando
terminaba de acomodar el último chino, sonó la puerta.
— Adelante.
— dije admirando como había quedado mi pelo.
— Sophie,
¿Aún no te has vestido? — me dijo la señora Scoapes entrando en la habitación.
— Te dará una pulmonía.
— Ahora
mismo me visto. — dije sonriendo y mostrando todos mis dientes.
— Oh — dijo
ella — te ayudaré, aún tienes que desayunar, y recoger a la señorita Martin.
— Lo bueno,
es que me levanté temprano — dije mientras la miraba entrar en el armario.
Después de
un minuto, su brazo me pasó a través de la puerta, un traje de saco y falda
blancos, con la orilla negra, debajo de la falda. Y con las orillas negras en
las mangas, y donde se cerraban los botones. Lo puse sobre la cama, y me pasó
una blusa negra de botones.
— ¡Oh,
Molly! Mi playera... — dije esperando que saliera otra prenda.
— Claro
Sophie — dijo Molly y salió con una playera negra de manga corta, con la imagen
dibujada de los Beatles cruzando el Abbey Road.
— Gracias
Molly — dije sonriendo y poniéndome mi playera de la suerte, y arriba la blusa.
No podía comenzar este ciclo sin ella. Después de todo, los 4 fabulosos me
habían acompañado a todos lados.
Después de
un gran desayuno, preparado por Joanna,
nuestra cocinera, salí en mi auto a las calles de Nueva York.
En realidad
no maneje mucho, porque la casa de Anna Parker estaba a sólo un par de calles
de mi casa. Sólo había visto a Anna una vez en un restaurante, una semana
atrás.
Ese día mi padre me esperaba en casa, lo cual era sumamente raro. Nos
sentamos a tomar un café y me dijo que tenía un nuevo socio, que acababa de mudarse
a Nueva York, y que tenía una hija de mi edad. Además de que, entraría en la
misma universidad.
Cuando me di cuenta, mis padres y yo estábamos en un restaurante con Peter
y Anna Parker. Fue una comida graciosa, Anna llamó al mesero garçon, pidió
cerveza aunque no estaba en la carta, y pidió que cambiaran la música del
lugar. Fue una cena que en realidad disfrute, a mis padres les escandalizó un
poco; pero como su socio lo vio bien, parecieron olvidarlo de inmediato. Me
ofrecí a llevarla a la universidad, alentada por mi padre y, aquí estaba.
Baje del auto, subí los tres peldaños que me guiaban hacia la puerta, y toqué
el timbre. Seguro, este inicio sería muy interesante.
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Bueno, bueno. Se que no se entiende.
XD, ya ven que me gusta cambiar el nombre a nuestras protagonistas.
Esta sera una historia....¿original? Si asi puede decirse...XD
Habra 4 capitulos de introducción.
Este es el primero.
Stephie, eres Sophia (que creativa soy)
Comenten, si quieren.
Si, sí quieren.
SE LES QUIERE!
Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! G-E-N-I-A-L!!!!!!!!!!
ResponderEliminarnueva historia, nueva historia ♪♪ yuhuuuu!!! :D
me encanta!! :D y soy Sophia!!! me gusta!! ;)
me voy a leer de inmediato el otro capitulooo!! :D
sthepe sofiaaaaaaaaaaaa me encanto valeeeeeeeeee es lo mas a leer mas
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