jueves, 12 de junio de 2014

Onion soup

Katherine Hale.


Bruce me enseñaba a limpiar el sonido, a armonizar, y a usar cada uno de los controles. Hicimos un ejemplo con varias canciones, y Sophie escuchaba atentamente, a un lado de mi.

Bruce sugirió que sería mejor que nos pusiéramos una a cada lado de él , ya que, así podríamos ver mejor. Observé que ambos se miraban de reojo, y no pude sino contener una sonrisa. Bruce hacía ese tic de llevarse la mano a la frente, y revolverse un poco el cabello que le caía por delante, cada vez que estaba nervioso. Y, nunca había visto a Sophie tan contenta.

El tiempo se pasó rápidamente, y cuando la alarma de bruce sonó indicando que teníamos que irnos, la tristeza llegó a ambos rostros. Algo tenía que hacer, así que hablé:

— Soph, ¿Quieres comer en mi casa? Puedes venir también tú, Bruce. Mamá dice que la casa se siente muy vacía desde que volvió tía Betty y ustedes se fueron a casa.

Sophie vaciló un instante antes de responder y bruce me observaba con una sonrisa en su rostro.

— Bueno, pero tendré que apagar el celular — decidió después de unos momentos, y le pasé el brazo sobre los hombros.

— Bueno, probarás mi famosa sopa de cebolla. — canturree

— Es buenísima — dijo Bruce con una sonrisa, y comenzó a platicar con Sophie, mientras yo me dirigía a la puerta, para salir por una vez de allí.

Sophie y yo fuimos en los asientos de adelante, y Bruce se sentó atrás. Pusimos el iPod de Sophie a todo lo que daba, y movíamos la cabeza al ritmo mientras  sonaban los Ramones.

Cuando llegamos a mi calle, me bajé para abrir, cuando me encontré con la sorpresa de que había alguien familiar en la banqueta. El chico del café que se moría por Anna estaba parado, observándonos.

— ¿Me están siguiendo? — preguntó divertido al verme.

— Vivo aquí — saqué mis llaves y las hice tintinear,  y vi como movía la cabeza hacia un lado para inspeccionar en el coche, si no estaba Anna dentro, supongo.

— ¿Tu que haces aquí?  — pregunté extrañada.

— Vine a solicitar empleo — señaló el cartel que decía se busca en la cafetería que acababa de abrir abajo.

— Pero, ¿no te va bien en la universidad? — pregunté

— ¿Te corrieron por acosar alumnas? — preguntó Sophie, que llegó a mi lado, y una sonrisa juguetona se le dibujó en el rostro.

— Renuncié  — contestó el chico rubio — Tengo la beca que cubre mis gastos universitarios, y me dejaban trabajar en las mañanas allí algunas horas para sacar un poco de dinero extra, pero debo cambiar mi horario, además, no es suficiente con lo que me pagan, así que…—

— ¿Qué estudias Tom?  — Sophie continuó con su interrogatorio, y me sorprendió que supiera su nombre, claro que esa chica siempre me sorprendía era una base de datos andante, y mucho más.

— Derecho, comienzo  mi cuarto semestre — respondió él.

— Espero que tengas suerte. — repuso Sophie — Bueno, nosotras nos vamos.

— Sí, adiós. — Repuso el chico mientras agitaba su mano. Nos despedimos y abrí la puerta, para que entraramos en el pasillo. Bruce la cerró un poco molesto.

— ¿Quién es? — preguntó al aire  y yo me mordí para no reírme.

— Es un chico de la universidad que está loco por Anna — le contó Sophie mientras subíamos los escalones, y estoy segura de que, si hubiera volteado, hubiera visto como el rostro de Bruce se destensaba lentamente.

— ¿Anna? — preguntó casualmente, con un tono de voz muy diferente, que Sophie pareció no notar.

— La bajista pelirroja — respondí y arrojé mis llaves a la mesa. — Pónganse cómodos, no acepto ayuda. Bruce, no la dejes ir a la cocina. — Me volví hacia mi primo y le guiñé el ojo.

Entré a la cocina, y pude oír algo de su conversación mientras abría el refrigerador.

— ¿Y porqué el interrogatorio? — la voz de bruce se oía con claridad.

— Bueno, no puedo dejar que cualquiera se meta con mis niñas, es decir, soy la manager, y la hermana mayor juramentada, y es mi Annie.

Reí al oírla, me parecía algo especial la amistad que habíamos formado, y me gustaba oír decir que “éramos sus niñas”. Comencé a cortar la cebolla y me pregunté que pensaría Anna si oyera a Sophie. Quizás le contestaría de mala gana, pero con una sonrisa.

Y deseé que estuviera allí, incluso Michelle, con quien me la pasaba peleando. Pero quizás era mejor así. Y en la noche o el lunes, podíamos sacarle todo entre las tres, y que esos dos tuvieran tiempo para coquetearse.

Mi mamá llegó una hora después, y saludo contenta a Bruce y a Sophie. Se recogió el cabello que ahora tenía pintado de negro. Antes yo me lo pintaba también, pero le dije que ya no quería, me costó convencerla, pero accedió al final.

 Se puso un mandil, me dio un beso en la mejilla y se puso a preparar una ensalada mientras yo marinaba unos bisteces.

— ¿Sopa de cebolla, eh? — preguntó y me encogí de hombros.

— Es la favorita de Bruce.

— ¿Y cómo les fue?, ¿Sophie es de tu banda?

— Bien, mamá. Ya tenemos el sencillo, y sí, es la baterista, ¿recuerdas que te conté de ella?

— Sí, ¿No pudieron venir las demás?

— Pues, no. Tenían compromisos.

— Es una lástima, ¿No quieres ir con tus amigos? Yo termino aquí.

— Sí, gracias má. — respondí. La verdad es que esperaba que no me dijera que me fuera con ellos, no quería arruinarle el momento a Bruce y Sophie, pero menos quería decirle a mi mamá que estaba de cupido, así que salí de la cocina, encontrándolos riéndose de una foto antigua mía donde estaba toda manchada de salsa de tomate.

— ¡Oigan!  — grité mientras me abalanzaba sobre ellos, que rieron más fuerte.

2 comentarios:

  1. afsdagsfasf mi Bruce *--*
    y y y Katherine haciendo de cupido *---*
    y mis niñas!!! *---*
    y asfadsgdhsjdh me intriga saber lo que pasara y quiero más!!
    y escribes taaan bonito que adsafsga ajajaj xD

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  2. a mi no me gusta mucho la cebolla, así que menos mal que no fui xD

    entonces... dices que a Bruce le gusta Sophie y estaba celoso de Tom.

    amé el capítulo y el plan siniestro que tienes.

    te amo ~

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